• Hace ya varias semanas que comenzaron a verse  los  primeros ejemplares de cernícalo primilla en el silo de Baena y en otros lugares del casco urbano.
  • El grueso importante de la población de primillas llegará a lo largo de todo este mes de marzo y en los primeros días de abril.

Un año más,  los voluntarios de GRODEN-Ecologistas en Acción y GREFA-Andalucía han  terminado todos  los trabajos de  reparación y mantenimiento de los   observatorios y nidos en el silo de Baena. Por tanto, está todo  listo para acoger a la importante colonia  de cernícalo primilla que se asienta en el silo. Desde el año 2011 ambas entidades promueven un proyecto de recuperación del cernícalo primilla en el silo en Baena.

Los días comienzan a ser más largos y las temperaturas suben poco a poco, lo que hace que el griterío de las primillas  se escuche cada vez más en  los cielos de Baena. Este año se espera alcanzar, al menos, la misma población de aves del pasado año 2022, que fue de  48/49 parejas reproductoras de la que 23 criaron en el silo.

Precisamente en el silo de cereales,  están pendientes de llevarse a cabo obras de rehabilitación del edificio, que afecta a la que denominamos como sala del hacking, con problemas de humedades y desprendimientos  ocasionados por los temporales. Aquí  precisamente  se concentran la mayoría de las parejas reproductoras. Una vez que termine la temporada de reproducción, allá por el mes de agosto,  el Ayuntamiento de Baena como entidad responsable del mantenimiento del edificio, deberá acometer  su rehabilitación.

El cernícalo primilla sigue siendo el mejor aliado de los agricultores y la disminución de sus efectivos   puede suponer un aumento  de las poblaciones de  insectos y roedores y por tanto más desequilibrio   para el  ecosistema agrario.

Una amenaza  para esta especie en Baena, al igual que en el resto de su área de distribución, es la  progresiva desaparición de su hábitat de alimentación, propiciada por los cambios de cultivos, principalmente el aumento de superficies leñosas en detrimento de los cereales y barbechos. La intensificación de las explotaciones agrícolas con  el uso masivo de agroquímicos  son muy negativas para esta especie que se alimenta de grandes y medianos invertebrados como son saltamontes, grillos, langostas, escolopendras,… además de pequeños roedores  como ratones y topillos.

También las obras de restauración de edificios, que si no se hacen de manera coordinada y adecuada, acaban por molestar a las aves durante la  nidificación o incluso provocando la perdida de oquedades donde crían.

Dada la preocupante situación de declive que ha sufrido esta especie, aproximadamente un 50 % de sus individuos, y que sus  colonias se encuentran en entornos urbanos, es urgente la declaración de ZEPA urbana para la colonia de cernícalo primilla de Baena.

Pareja de cernícalos primillas en el Silo de Baena. Foto: José María Ayala Moreno.

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