Cuenca en transición: 12 medidas

Propuestas para el municipio de Cuenca elaboradas por Ecologistas en Acción de Cuenca, para los grupos políticos de cara a las elecciones locales y autonómicas de mayo de 2023.

La paulatina escasez del petróleo (cenit o pico del petróleo) y por tanto el fin de la energía barata, va a condicionar (ya lo está haciendo) la vida, sobre todo en las ciudades. Esta crisis energética, unida a la emergencia climática y la crisis ambiental global, requiere iniciar cambios profundos para adaptarse mediante una “transición hacia la descarbonización y baja energía”, en línea con los procesos que en su conjunto se denomina “El Movimiento de Transición”.

Los Ayuntamientos de más de 50.000 habitantes y que además se han acogido a la normativa de “grandes ciudades” (cómo Cuenca) tienen amplias competencias en materia ambiental (en especial en la vigilancia y el control del medio ambiente) y de ordenación territorial, por lo que su implicación es fundamental para conseguir unas políticas basadas en la sostenibilidad y aparcar la visión miope y cortoplacista que todavía gobierna en gran medida.

El diagnóstico de las ecologistas plantea un escenario (si no se ponen medidas inmediatas) de profundización de la crisis ambiental, que derivará en una nueva recesión, más profunda de la ocurrida en 2011 y que, una vez más, sufrirán intensamente las clases populares, mientras unos pocos privilegiados apenas se verán afectados. Como lleva años diciendo Yayo Herrero: “El decrecimiento no es una opción, lo es llegar a él de manera fascista o justa”.

Para ello, y apostando claramente por un decrecimiento social y ambientalmente lo más justo posible, Ecologistas en Acción de Cuenca, presentamos este documento que incluye una serie de propuestas concretas, factibles y realistas, que se pueden aplicar en Cuenca, por cualquier formación política (sea del signo que sea) y que permitirían avanzar en la transformación que la actual crisis energética, ambiental, social y económica requiere.

Estas propuestas están basadas en tres principios básicos:

1. El actual modelo económico y energético es social y ambientalmente insostenible.
Cualquier proyecto político responsable debe supeditar el desarrollo económico a la capacidad de los ecosistemas para generar energía, renovar sus recursos naturales y asimilar las emisiones contaminantes. Todos los estudios científicos estiman que estamos llegando a los límites del planeta. Hemos consumido más de lo que podíamos para sostener la situación al largo plazo. Lo estamos viviendo ya y la única opción pasa por cambiar el modelo y caminar hacia el decrecimiento justo y el descenso del consumo energético.

2. Es necesario un compromiso de cambio de dimensiones estratégicas.
Sin una firme voluntad política de replantearse el modelo socioeconómico, cualquier política ambiental quedará vacía de contenido, sea cual sea el programa que la vertebre.

3. Participación y transparencia no pueden ser solo palabras.
La participación es un derecho y como tal debe ser reconocido a todos los agentes sociales, y la transparencia un deber y como tal exigible en todos los ámbitos de la Administración pública. La corrupción debe desaparecer, recuperando la dignidad y la ética en el trabajo público. La transparencia es la única palanca que permitirá avanzar en políticas menos corruptas. Esto a su vez fomenta una mayor implicación y participación ciudadana, en unas instituciones en las que puede ser mayor confianza que en la actualidad.

Teniendo en cuenta estos tres principios básicos, los ejes de acción que planteamos son tres:

Descenso energético y mejora de la calidad del medio ambiente urbano.
Movilidad sostenible.
Actividad económica a pequeña escala.

Las propuestas que hemos elaborado a partir de estos tres ejes se agrupan en nueve áreas temáticas y son, en su conjunto, imprescindibles para lograr que desde la administración local se mejore la calidad de vida de la ciudadanía y que se avance hacia la sostenibilidad energética, ambiental, social y económica. Sin embargo, de entre todas ellas hemos querido destacar doce acciones concretas que aquí y ahora pueden significar el punto de inflexión que Cuenca necesita para emprender el futuro de otra manera. El cambio político en el municipio de Cuenca tras las próximas elecciones puede dar lugar a la entrada de nuevas iniciativas que supongan un giro a la preocupante situación actual. Invitamos a todas, grupos políticos, organizaciones sociales de todo tipo y ciudadanía a sumarse a ellas.

12 medidas para avanzar hacia la transición

Mediante la participación y la democracia real, devolver el control del destino de la ciudad a sus ciudadanos, enviando un mensaje claro a los especuladores y a los corruptos, que tienen que supeditarse a la voluntad de la ciudadanía. Auditoría pública de la deuda. Apuesta por mayor transparencia en los proyectos.
Fomentar la pequeña economía social generadora de actividad a nivel local (artesanas, pequeña industria de transformación, energías renovables y de fomento de la eficiencia energética, cuidados a las dependientes y a las cuidadoras, etc.) No implantar nuevos centros comerciales ni grandes superficies comerciales. Fomento de la agricultura ecológica, la permacultura, los canales cortos de comercialización y la soberanía alimentaria. Recuperar los huertos urbanos en las vegas y los terrenos del ferrocarril. Prohibición del cultivo de transgénicos.
Modificar el nuevo POM hacia un modelo de ciudad compacta y basada en la sostenibilidad. Impedir la recalificación de suelo hasta que no se haya ejecutado, al menos el 90 % del suelo clasificado en el planeamiento general en vigor. Descartar nuevos desarrollos alejados de la ciudad (como el PSI de los Palancares). Lucha contra los desahucios. Alquiler social público.
Paralizar la urbanización (construcción de viviendas u otras edificaciones) en zonas inundables. Ocupar estos espacios con huertos urbanos ecológicos. Dedicar los terrenos del ferrocarril a dotaciones para la ciudadanía conquense, y nunca al pelotazo urbanístico.
Reducir la necesidad de movilidad (retirar el distrito único educativo). Elaborar Planes de Movilidad Sostenible (descartando el plan actual) que fomenten, el transporte no motorizado (peatón, ciclista), el transporte público y limiten el uso del transporte privado motorizado, reduciendo las plazas de aparcamiento en rotación y peatonalizando amplias zonas en el centro de la ciudad y casco histórico. Ampliación de aceras. Implantar una ZBE ambiciosa. Estación única intermodal en el centro de la ciudad. Recuperar el ferrocarril.
Controlar y vigilar el cumplimiento de la normativa de calidad del aire en el área metropolitana. Tanto en relación con la movilidad como a la instalación de industrias muy contaminantes como cementeras-incineradoras o gestoras de residuos industriales y agroganaderos, en el término municipal de Cuenca.
Gestión pública y directa del agua. Inversión en la obsoleta red de distribución para reducir las fugas. Fomentar el ahorro de agua a través de la aprobación de ordenanzas para su uso eficiente y a través de campañas de sensibilización. Tarificación del agua por tramos para que pague más quien más consuma, con un mínimo vital (80 l/persona/día) de agua gratuito para las rentas bajas.
Cuenca ciudad en transición (preparándose ante el cambio climático y la escasez de petróleo). Reducción del gasto de energía en un 20 % y aumentar las energías renovables un 20 % al final de la legislatura. Cuenca ciudad desnuclearizada. Luchar contra la pobreza energética.
Implantar un sistema de envases de un solo uso con depósito (SDDR), para caminar hacia un sistema de envases retornables. Introducir un nuevo contenedor de residuos orgánicos y compostaje comunitario en barrios donde sea posible. Establecer instrumentos y medidas que incentiven la reducción de residuos de, al menos un 10 % en peso. Tasas de basura en función de los residuos generados. Evitar el traslado de la planta de gestión de residuos (AGES 5) a 15 km de la ciudad.
Establecer políticas de compra pública que fomenten productos y servicios ecológicamente sostenibles y socialmente justos. Apuesta por la agroecología con alimentos de agricultura ecológica y producción familiar y local en todos los comedores públicos.
Conservación decidida del Casco histórico de la ciudad, de las Hoces del Júcar y Huécar y en general del paisaje natural de su entorno, así como de los edificios singulares fuera del casco.
Conservación del rico patrimonio natural y forestal del municipio de Cuenca. Gestión sostenible de los bosques, aprovechamiento de la biomasa para calefacción. Descartar el uso de procesadoras en los montes de Cuenca.