Situada al norte de la provincia de Granada es Zona Declarada de Especial Conservación (ZEC) por la UE.- De este complejo turístico están detrás el grupo Orenes y Vive Collado S.L., esta útima ligada a los anteriores propietarios del proyecto paralizado en 2007.
El entorno protegido de la Sierra de la Sagra, en el norte de la provincia de Granada, vuelve a verse amenazada por un macroproyecto de complejo turístico del que está detrás el Grupo Orenes, bajo el paraguas de Vive Collados SL, nombre de la sociedad en la que también forman parte los anteriores propietarios y promotores del proyecto paralizado en 2007.
El entorno de la Sagra está catalogado dentro de la Red Natura 2000 como una Zona de Especial Conservación (ZEC), una figura de protección otorgada por la Unión Europea a lugares de alto valor ecológico que contribuyen a la conservación de hábitats y especies de gran interés con el fin de garantizar su supervivencia a largo plazo.
Como ya ocurriera en 2007, un nuevo proyecto de ampliación del centro turístico Collados de la Sagra, vuelve a poner en jaque el ya frágil equilibrio ecológico de esta zona protegida. En esta ocasión, se plantea la demolición completa del complejo actual y la nueva construcción de los siguientes elementos:
– EDIFICIO DE SERVICIOS COMUNES que incluye recepción, restaurante, gimnasio, spa, saunas, baño turco, jacuzzi y piscinas interiores y exteriores.
– 38 GEOCABAÑAS aisladas. La cabaña más pequeña cuenta con 40 metros cuadrados y con spa integrado.
– PLANETARIO y NUEVO TELESCOPIO.
– CENTRO DE VISITANTES.
– OTRAS INFRAESTRUCTURAS: aparcamientos, caminos, conducciones de agua, saneamiento, electricidad, combustible, comunicaciones …
Se trata de 16 hectáreas de construcciones, cuando el complejo actual ya existente desde el año 2005, no llega a 3 hectáreas.
El complejo turístico Collados de la Sagra, así como el proyecto de ampliación, pertenece al Grupo Orenes, uno de los mayores grupos de España dedicados a los juegos de azar y a las apuestas online.
No obstante, la situación no es nueva: en 2007 ya se planteó una ocupación total de 10 hectáreas de construcciones con unas instalaciones similares a las que se plantean construir en 2021. La Junta de Andalucía no autorizó el proyecto por el notable impacto que conllevaba sobre la fauna y la flora amenazadas de la zona, así como sus hábitats.
Esta ampliación no sólo afectará a la zona concreta de actuación, sino a todo el entorno de la vertiente Norte de la Sagra, incluyendo al Río Bravatas, cuyo nacimiento es considerado científicamente como una de las fuentes de las que nace el río Guadalquivir, cuyo aporte hídrico es fundamental para la fauna y la flora local, como para el riego de los agricultores de la zona, a lo largo de los 182 kms que transcurre la conocida como cuenca del Guadiana Menor. Además, hay estudios científicos de renombre que aluden a la vulnerabilidad de los acuíferos de esta zona, tanto por su escasez estival (época en la que se prevé el mayor número de visitantes al complejo), como por los problemas acarreados por la depuración de aguas.
Con todo ello, el nuevo proyecto constituye una clara invasión de hábitats, a la que hay que añadir la contaminación acústica, lumínica y el riesgo incrementado de incendios.
En 2007, Ecologistas en Acción y los grupos ecologistas asociados de la comarca ya manifestaron su total oposición al proyecto de ampliación del centro turístico Collados de la Sagra. Entonces, como ahora, suponía un daño irreparable para el medio ambiente. El actual proyecto respaldado por el Grupo Orenes excede la magnitud del anterior, y desde Ecologistas en Acción se espera que las autoridades locales y autonómicas actúen en consecuencia, impidiendo el mismo.
En el pasado, la Sagra se vió injustamente excluida de cualquier tipo de protección territorial ambiental , hasta la llegada del LIC y el ZEC. Recientemente se ha planteado incluir esta sierra dentro de la red de parques naturales por lo que la aprobación, en 2018, por unanimidad en pleno del Ayuntamiento de la Puebla de Don Fadrique, igual que una proposición no de ley en el Parlamento andaluz, en 2017, donde se proponía la ampliación del Parque Natural de Castril hacia las Sierras del Nordeste donde se ubica la Sagra, fueron dos decisiones importantes en ese sentido . Posteriormente, la dejación y el olvido de los políticos locales y autonómicos, ha hecho que la Sagra siga esperando que su riqueza natural y sus ecosistemas obtenganla protección que merece.
Por el momento, el Ayuntamiento de Puebla de Don Fadrique, con mayoría absoluta del Partido Popular, no solo no se ha pronunciado ante el proyecto, como así se lo ha pedido Asociación Ecologista Cultural La Sagra, sino que ya ha solicitado la ampliación de la carretera que lleva a los Collados de la Sagra, aludiendo al tráfico de coches de fin de semana y la importancia del turismo en dicha zona. Quizás, un signo de los aires de “ladrillazo” que mueven a la Corporación Municipal de Puebla.
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