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Nada que celebrar y mucho que denunciar

El gobierno de Castilla-La Mancha ha elegido el lema “valoremos el agua” para la celebración del día del agua, hoy 22 de marzo de 2021. Y según publica en su web:  Toledo, 22 de marzo de 2021: “El desafío del agua a nivel nacional debe afrontarse desde el apoyo a un modelo de agricultura familiar en toda España, que apueste por las pequeñas y medianas explotaciones”. Este es el mensaje que hoy, con motivo del Día Mundial del Agua, ha lanzado fuera de las fronteras territoriales el consejero de Agricultura, Agua y Desarrollo Rural, Francisco Martínez Arroyo.

Pancarta en Pozo Mochuelos

Estamos acostumbrados desde hace muchos años a los discursos grandilocuentes entorno al recurso del agua en nuestra comunidad, casi siempre centrados en la denuncia justificada de la insoportable herencia del trasvase del Tajo al Segura, y en la crítica al uso del agua en Levante, desde Castellón a Almería, pasando por Murcia, y en el buen uso y la necesidad de más agua en Castilla La Mancha, basándose en el supuesto legal de “cuenca cedente”. Pero nunca se hace referencia a la sobreexplotación de los acuíferos del Guadiana, que han hecho desaparecer lagunas y ecosistemas tan importantes como las lagunas que formaban el conjunto de La Mancha Húmeda, reconocido como Reserva de la Biosfera, o lugares tan importantes como los Ojos del Guadiana o las mismas Tablas de Daimiel. Y, en nuestra propia provincia, los acuíferos de la Mancha Oriental llevan años en situación crítica, tanto por la sobreexplotación de los mismos como por la contaminación por nitratos de una agricultura intensiva y depredadora de los recursos del suelo y del agua, a la que desde hace unos pocos años se ha sumado la ganadería intensiva, representada por un modelo de macrogranjas  propiedad de grandes empresas, que con el apoyo de esta misma Junta que hoy proclama la necesidad de un modelo familiar, se ha ido extendiendo por todo el territorio.

Pozo de la CHSegura en Agra (Albacete)

Lo peor es que, lejos de empezar a cambiar ese modelo insostenible de agricultura y ganadería intensiva, y en manos de unas pocas empresas, asistimos su extensión cada vez más rápida por la cuenca del Segura de nuestra provincia. Y además, intentando hacer pasar esta sobreexplotación bajo el nombre de “regadíos sociales”, para que, bajo el escudo de cientos de pequeños agricultores con escasos terrenos, pase desapercibido la concesión de los mayores volúmenes a un puñado de grandes terratenientes o poderosas empresas (la mayoría con domicilio fiscal en Murcia), que están trasformando los usos tradicionales de secano, en cultivos intensivos de regadío, en su mayor parte con destino a la alimentación de la ganadería intensiva.

Desde Ecologistas en Acción de Albacete nos sumamos a la denuncia que ha hecho pública la Plataforma en Defensa de las Fuentes de la Cuenca del Segura, y su declaración de “antisocial y fraudulento” para los nuevos regadíos autorizados en la provincia de Albacete.

La entrada Nada que celebrar y mucho que denunciar aparece primero en Ecologistas en Acción.

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