- La construcción de un macroedificio, junto al Conjunto Arqueológico de Baelo Claudia en la Ensenada de Bolonia en Tarifa, generó un fuerte rechazo social. Ecologistas en Acción, junto a otros colectivos, organizó diversas protestas y pidió a la Junta de Andalucía que no construyese una mole de hormigón que degradaría uno de los paisajes más bellos del sur de Europa.
A pesar del rechazo social y del evidente impacto paisajístico, la administración andaluza hizo caso omiso a las alegaciones y construyó la enorme mole, cuyo espacio expositivo alberga un exiguo número de piezas, varias de ellas reproducciones de las conservadas en el Museo Arqueológico Nacional y en el de Cádiz.
Al poco tiempo de su inauguración, en diciembre de 2007, el edificio destinado a sede institucional del Conjunto Arqueológico comenzó a presentar diversas deficiencias.
En junio de 2023, solo unos 15 años después de su inauguración, su estado es lamentable. Los paramentos exteriores y parte de los interiores que se cubrieron con losas de piedra, según los promotores para reducir el impacto visual del edificio, aparecen rodeados de vallas de obra para impedir que los visitantes se acerquen a ellos y evitar así daños por desprendimientos.
En algunas zonas del patio y de los alrededores se aprecian hundimientos del firme. Los techos del área expositiva presentan un aspecto lamentable con numerosas goteras y daños que obligan a los trabajadores a colocar carteles de “peligro piso deslizante”, junto a cubos para recoger el agua que cae de la cubierta, incluso, días después de las últimas lluvias.
Varias de las pantallas interactivas no funcionan, la tienda de recuerdos y publicaciones está cerrada, la sala de exposiciones temporales presenta una actividad mínima, etc.
Por si todo esto fuese poco, el sindicato UGT ha denunciado recientemente la falta de personal en las tareas de seguridad y mantenimiento. Esta carencia de personal impide ofrecer a los visitantes un servicio digno.
Es cierto que el yacimiento necesitaba unas instalaciones donde ubicar todos aquellos servicios propios de un espacio de estas características; pero ¿de verdad era necesario construir una mole de este tamaño claramente sobredimensionado e insostenible? ¿No hubiera sido más lógico construir algo más acorde a las necesidades y en un lugar menos impactante?
Desgraciadamente, el tiempo nos ha dado la razón y como en tantos otros casos, la megalomanía de unos políticos ineptos unida a la connivencia de algunos técnicos de la administración, dan como resultado la presencia de un edificio infrautilizado, que degrada el paisaje y que se cae a pedazos.
Desconocemos si en estos años pasados alguien ha exigido a los responsables de la construcción que solventen las graves deficiencias que presenta el edificio, pero mucho nos tememos que, como es habitual, nadie habrá empleado los mecanismos legales a su alcance para que los responsables cumplan con sus obligaciones.
Desde Ecologistas en Acción esperamos que, al menos, se aprenda de los errores y no se vuelva a despilfarrar el dinero de los contribuyentes en obras faraónicas e insostenibles que causan más perjuicios que beneficios a la sociedad y al medio ambiente.
La entrada La decadencia de un edificio que nunca debió construirse junto a Baelo Claudia aparece primero en Ecologistas en Acción.
0 Commentaires